“En un país que hace un uso abusivo de la prisión preventiva y un sistema penal que tiene mínimos extremadamente altos para algunos delitos, como la rapiña, lo que se logra con esta iniciativa es un aumento encubierto de algunas penas. Más tiempo potencial de prisión para reincidentes y reiterantes. Sabemos que el sistema carcerlario es criminógeno y en término relativos no rehabilitador. Pero dejaremos más tiempo en las cárceles a las personas que no pueden salir del círculo del delito. Como se decía anteriormente esta lógica en parte es una renuncia implícita a desafíos de políticas de reinserción”, dijo Preve.
Izquierda y seguridad: Federico Preve
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